
En el corazón de la Región de Los Lagos, rodeado de montañas, bosques milenarios y volcanes nevados, se encuentra una joya que deslumbra por su color y su calma: el Lago Todos los Santos. A solo una hora de Puerto Varas, este lugar es uno de los paisajes más impactantes del sur de Chile y un imperdible para quienes buscan experiencias auténticas y contacto directo con la naturaleza.
Un lago de aguas esmeralda
También conocido como el “lago de las aguas verdes”, el Lago Todos los Santos debe su color único a los minerales que provienen del deshielo de los volcanes Osorno y Tronador. Su superficie tranquila refleja los picos nevados y los bosques que lo rodean, creando un escenario que parece pintado a mano.
Desde Petrohué, se puede embarcar en paseos que recorren sus orillas, llegando incluso hasta Peulla, un pequeño poblado enclavado entre montañas, perfecto para disfrutar del silencio, los aromas del bosque y la inmensidad del paisaje.
Aventura y naturaleza
El Lago Todos los Santos es un punto de partida ideal para explorar la zona. A pocos kilómetros se encuentran los Saltos del Petrohué, una serie de cascadas naturales donde el agua cae con fuerza entre rocas volcánicas, ofreciendo una de las postales más reconocibles del sur de Chile.
También se pueden realizar actividades como kayak, senderismo, cabalgatas o simplemente disfrutar de un picnic frente al lago. Cada rincón invita a desconectarse del ritmo urbano y reconectar con lo esencial.
Puerto Varas: entre tradición, cultura y vistas al volcán
De regreso en Puerto Varas, la ciudad vibra con vida durante el verano. Sus calles se llenan de visitantes, cafés con vista al lago y un ambiente relajado que combina historia y modernidad.
Caminar por la Costanera del Lago Llanquihue al atardecer es una experiencia obligada. Desde allí, el Volcán Osornodomina el horizonte con una imponencia que enamora a cada viajero.
Entre los imperdibles de la ciudad destacan:
- La Parroquia del Sagrado Corazón, ícono arquitectónico de Puerto Varas.
- El Cerro Philippi, ideal para una caminata corta y una panorámica única de la ciudad.
- El Mercado Municipal, donde los sabores del sur se mezclan con la calidez local.
- Y, por supuesto, la gastronomía local: kuchenes, cervezas artesanales y platos inspirados en la cocina alemana y chilota.
Un verano que se siente distinto
Visitar el Lago Todos los Santos y Puerto Varas en verano es vivir el sur en su máxima expresión: aire puro, paisajes vivos y la sensación de estar en un lugar donde la naturaleza marca el ritmo.
Entre lagos, cascadas y caminatas, cada día es una invitación a descubrir la esencia del sur de Chile, un destino que combina lo mejor de la aventura, la cultura y la tranquilidad.